"Skyrim": dragones y metal
Saludos a todos los que estáis leyendo a través de la pantalla.
Una semana más vuelvo a dirigirme a mi querido público pero... esta vez he decidido hacer algo totalmente diferente que, si bien es verdad puede estar relacionado en cierta manera con la música, no trata propiamente de ella. Esta entrada va a estar destinada a algo que a los que amamos el rock y el metal también nos encanta (normalmente), los videojuegos y, si estos no gustan, lo que sí que nos vuelve totalmente locos es la cultura vikinga y nórdica (más aun si se le añade dragones).
Os preguntaréis: ¿Qué puede estar en relación con vikingos, música, dragones y videojuegos al mismo tiempo? Para los que aun no lo hayáis adivinado es nada más y nada menos que The Elder Scrolls V: Skyrim, la joya de la corona de la compañía de videojuegos dirigida por Todd Howard: Bethesda.
El motivo que me lleva a romper con la tradición de hablar sobre canciones de rock es que, este videojuego ha supuesto un antes y un después en la historia de las distintas comunidades de "gamers" y "modders", que llevan invirtiendo nada más y nada menos que ocho años de su vida en el mismo. Sí, parece que fue ayer pero, Skyrim se estrenó esta semana en 2.011, en una fecha bastante peculiar, el 11/11/11.
Una semana más vuelvo a dirigirme a mi querido público pero... esta vez he decidido hacer algo totalmente diferente que, si bien es verdad puede estar relacionado en cierta manera con la música, no trata propiamente de ella. Esta entrada va a estar destinada a algo que a los que amamos el rock y el metal también nos encanta (normalmente), los videojuegos y, si estos no gustan, lo que sí que nos vuelve totalmente locos es la cultura vikinga y nórdica (más aun si se le añade dragones).
Os preguntaréis: ¿Qué puede estar en relación con vikingos, música, dragones y videojuegos al mismo tiempo? Para los que aun no lo hayáis adivinado es nada más y nada menos que The Elder Scrolls V: Skyrim, la joya de la corona de la compañía de videojuegos dirigida por Todd Howard: Bethesda.
Desde el inicio, esta gran producción estaba destinada a triunfar por sus innovaciones: un sistema de combate muy criticado pero diferente (quizá le faltase algo de dinamismo), una libertad total en un amplísimo mundo abierto con unos gráficos que, a día de hoy, todavía te dejan impresionado, un sistema de mejora que te permite montar un personaje desde cero y convertirte en lo que desees... Todo esto y más con el acompañamiento de una excelente y bucólica banda sonora que influye en la inmersión de las situaciones que se te presentan a lo largo de la aventura; sin olvidarnos de los divertidos "bugs" que también podemos encontrar, siendo parte de la historia de los videojuegos.
Resumiendo la historia y sin mucho "spoiler" (por si aun no habéis jugado... ¡Aunque deberías hacerlo ya!), se nos habla de un personaje que, en un contexto de guerra civil entre Imperiales (muerte a los Thalmor) y Capas de la Tormenta (malditos racistas...), descubre su poder semidivino y de carácter ancestral: es Sangre de Dragón y utilizará la "Voz". Este debe perseguir y destruir al dragón Alduin "el Devorador de Mundos" que busca destruir a la humanidad para que los dragones puedan volver a gobernar. En el periplo hacia la consecución de este objetivo te encontrarás con infinitas misiones y diferentes gremios, a los que podrás apoyar o hundir, que harán de esta empresa algo más sencillo (si derrotar a un dragón legendario se puede considerar sencillo) y prestarán su ayuda y sus servicios al Sangre de Dragón.
Aportando ahora mi experiencia personal, este juego ha supuesto mi entretenimiento y gozo durante una gran cantidad de años. Aunque lo descubrí tarde (en 2.013), llevo a mis espaldas unas 700 horas jugadas (casi nada), y en ellas me he quedado embobado con los más simples detalles o los grandes paisajes de una belleza extraordinaria; ¿cómo olvidar el paraje que circunda al Templo de Auriel?
La relación con el rock y el metal de este título la podemos encontrar en su banda sonora (obra maestra entre obras maestras) de corte épico y vikingo escrita brillantemente por Jeremy Soule. El tema principal: Dragonborn Theme ha sido versionado a una gran cantidad de estilos, dentro de los cuales se incluye el metal épico y es que, estas obras y estilo de videojuegos se prestan a hacer este tipo de "covers" siendo un género que a los metaleros les llama mucho la atención.
Espero que os haya gustado este tipo de tributo, análisis y experiencia personal que sale de lo habitual. Puede que en un futuro suba otros artículos sobre videojuegos con banda sonora destacable y su relación con el rock/metal (si la hubiera).
No olvidéis nunca: HAIL TO THE ROCK!
Escrito por: Javier Villena Esclapez
Agradecer a Bethesda su gran trabajo y el hacernos entretenernos con sus productos.
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Muy buena innovación. Sigue así tío.
ResponderEliminar¡Muchísimas gracias! Me alegro que os gusten mis entradas, temas y reflexiones🔥🤘🏻
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